Municipio tranquilo y pintoresco con experiencias únicas de turismo rural en su hermosa zona de quintas productivas circundantes, reconocida como Capital Nacional del Arándano y Tierra de Frutos. La Criolla toma su nombre en honor a Flora del Carmen de Urquiza, hija del General Urquiza, a quienes los inmigrantes apodaban la Criolla. Ella y su esposo, dueños del campo Bella Vista, impulsaron cultivos de citrus, olivos y viñas todos provenientes de Europa, al igual que los primeros inmigrantes para trabajar las tierras.
Hoy, La Criolla es una pujante localidad en una geografía de suaves lomadas y aguadas, donde predomina la actividad frutihortícola y forestal, las plantaciones de cítricos, forestaciones de eucaliptos, y también cultivos intensivos de arándanos y de nogales de pecan. Caracterizada por propiedades en forma de chacras y quintas, muchas ofrecen experiencias turísticas acompañadas por sus propios dueños.
Viñedos y bodegas programan degustaciones y experiencias de enogastronomía a lo largo del año. Hay eventos especiales para la época de vendimia, organizando visitas guiadas con el relato histórico y vivencial, el corte de los primeros racimos, y la pisada de uvas, como experiencia lúdica.
La localidad tiene una pintoresca avenida, una cuidada plazoleta Héroes de Malvinas y la ecoplaza ambiental "Alegría", una iniciativa de orgullo para los vecinos. En un gran predio se realiza todos los años la Fiesta del Arándano, con stands del sector industrial, comercial y emprendedores, acompañados de show artísticos.